viernes, 18 de noviembre de 2011

CINCO RAZONES PARA

CONTRATAR UN DECORADOR


Texto: Arq. AVILA, Elvio Dario - Miembro de DArA - Docente y coordinador carrera DECORADOR  I.S.E.T. - Profesor UCSF (Universidad Católica de Santa Fé)
Fotos: del autor
 
El entorno que creamos para nuestra vida cotidiana dice mucho de cómo somos. Al igual que la vestimenta, los espacios en los que habitamos comunican, en mayor o menor medida, nuestra identidad o cómo queremos ser vistos.
Decorar, en el sentido más fiel a la etimología de la palabra, equivale a “crear imagen”, y es con ese sentido que adquiere relevancia en el mundo actual, ya no como el frívolo acto de adicionar elementos a una cosa o espacio, sino como la acción de dotarlo de nuevo sentido y original valor estético.

Cuando se emprende la tarea de “decorar”, es porque existe la necesidad interna o externa de modificar, actualizar o adaptar un espacio a nuevas condiciones de uso y/o identidad. Vemos algunas de las razones por las que es recomendable asesorarse por un profesional decorador: 

LA ESTÉTICA: El decorador es un intérprete. Define y comunica de manera eficaz la identidad que el usuario quiere lograr, ya que sabe de combinaciones de texturas, materiales, colores, iluminación, estilos, etc.  


LA ECONOMÍA: El decorador está capacitado para orientar al usuario en función de su presupuesto y expectativas, eligiendo lo más adecuado bajo estas dos condiciones. Asimismo, puede recalcular el presupuesto en caso de que el usuario desee cambios que no estaban previstos, o sea: fuera del presupuesto  (el famoso “y ya que estamos….”)

EL TIEMPO: El decorador  organiza los rubros y gremios para la ejecución de las tareas de forma ordenada y eficiente. Libera al usuario de tener que lidiar con los operarios y los proveedores. Coordina y dirige la ejecución de las obras evitando complicaciones o correcciones posteriores.
 

LA FUNCIONALIDAD Y EL CONFORT: En la era de la “customización” -“personalización”- cada necesidad tiene su respuesta particular. En decoración, los aspectos funcionales (medidas, ergonomía, zonificación…) son tan importantes como la elección de las texturas, los materiales, colores, complementos, etc. a fin de lograr una expresión única y particular adaptada a cada usuario.  Un buen decorador hace una muy buena entrevista previa, donde pregunta y se interioriza sobre aspectos íntimos de los usuarios.

LA CERTEZA: El decorador es un especialista que está al tanto de las novedades, tanto en materia de estilo como de soluciones y materiales. Es por ello que contratar un decorador es siempre una buena inversión, no solo en el sentido del ahorro económico o de tiempo, sino por el hecho de que es una garantía para “no equivocarse”, logrando comunicar exactamente lo que se desea.

Misiones en general y Posadas en particular, en su constante expansión,  requiere cada vez más de profesionales innovadores, responsables y creativos que reinterpreten las particularidades de nuestra cultura en un contexto de globalidad. 
Oficinas, tiendas, restaurantes, departamentos, lofts, galerías, casas, vidrieras, eventos, hoteles, empresas, comercios, y muchos otros sectores pueden ser intervenidos creativa y eficazmente por los decoradores.
Afortunadamente, desde hace varios años existe en Posadas un instituto terciario donde se forjan profesionales de alta calidad técnica y humana para atender éstos y muchos otros  requerimientos de la creciente demanda. La formación estética de los profesionales y el entrenamiento  mediante la resolución en prácticas proyectuales, abarcando variados rubros, garantiza la amplitud e idoneidad de los egresados.